Azul se mostraba feliz, expectante de que a su alrededor
todo se encontraba bien, con una armonía implacable. Tenía a su Todo. Mostrarás
una fortaleza que los demás quisieran tener, honrarás su memoria con una felicidad
que te haga recordar lo que pasaste con Todo. Vivió a tu lado cualquier cosa
inimaginables, y por supuesto las imaginables.
¿Qué pasó aquí? –con voz rasposa pero dulce dice Todo.
-Lloro por ti, por todo lo que pasamos, por eso mismo es tu nombre, Todo- dice
Azul.
Mejor recuérdame, por lo que fui, no por lo que pasa en
este momento, que gracias a ti comprendí lo que es la complicidad, la amistad,
y lo más importante, el amor. ¡Dichoso este sentimiento que te tengo! –Todo,
mientras acariciaba su rostro, observando una lagrima, pura, transparente,
sincera.
Un abrazo fundido, sin mirar atrás la bufanda roja se
arremolina entre su cuerpo su cabello dorado como el trigo del campo, brillaba
más que nunca, su cara iluminada le dijo: -Se que un adiós no vuelve, pero será
un hasta luego, un nos separamos para vivir nuestra historia, doy una lagrima
para que sepas lo que siento por ti, guárdala, ve feliz a ese mundo etéreo e
infinito espérame que me gustaría volver a verte.-
Te despedirás y sabiendo que lo volverás a ver, por lo
que fue, es y será.
Face del autor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario