"Aveces no sabes a donde vas, o de donde perteneces. Pero siempre
existe una melodía que te acompaña a donde vayas.
Cada paso que voy dando en aquel jardín inmenso, lleno de tulipanes y
pequeñas criaturas de luz volando alrededor mio,
me van forjando el propio camino que solo el caminante puede
recorrer.
Sin importar el ayer, porque en el hoy ya no existe. El mañana en este
mundo nuevo, aun no se ha escrito.
Pues apenas puedo sentir lo que es caminar descalzo, y experimentar
la sensación que genera el frío bajo mis pies.
Danzar y entonar las rimas adecuadas para hacer del viento una
gran ráfaga, que lleve consigo sueños y alegrías.
Por ratos pierdo el sentido, como si esas criaturas
se llevaran mi memoria al volar junto a mi.
Atrapándome y endulzándome con sus movimientos místicos y
bellos. Haciendo de mi recorrido,
una pasarela con sus luces deslumbrantes, que aun en la plenitud del
día, se puede distinguir su luz.
El lugar se torna en una gama de azules, pues el reino de la lluvia ha
llegado. Me he quedado sin dirección, dudo al dar un paso
pues el no saber que habrá frente a mi, me ha inmovilizado. Quede solo,
sin nadie ni nada que entienda mi voz. Y a lo lejos se escucha en el rincón que alguien canta, detrás de aquél árbol de hojas azules..."
Face del autor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario